¿Alguna vez ha querido ver sus espacios verdes y plantas prosperando con poco trabajo y mucho RESPETO POR LA NATURALEZA? Es muy simple, solo deje que la naturaleza actúe de la manera que mejor lo hace: ¡EVOLUCIONE! La dirección es al equilibrio y la ARMONÍA. NAMI es la solución más cercana a la naturaleza que hemos encontrado.
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Equipo NAMI
El uso de NAMI para cultivar plantas tiene cuatro efectos importantes útiles para mejorar el crecimiento y, por lo tanto, todo el ECOSISTEMA:
 
El número de microorganismos útiles (LA VIDA) aumenta, por lo que las plantas disponen de una fuerza extra que transforma las sustancias minerales presentes y las hace asimilables por las raíces, que luego las transfieren a la planta hasta las hojas. De esta forma tendremos plantas más sanas, robustas y con una vegetación equilibrada, frutos de tamaño adecuado y sabor intenso, hojas muy abiertas con un color homogéneo e intenso que harán más fotosíntesis y por tanto más útiles a todo el ECOSISTEMA.
Mejora la microcapilaridad y por lo tanto el flujo de agua en las distintas capas.
Descompone más rápido la sustancia orgánica presente, haciéndola disponible en mayor cantidad y máxima calidad, esto reduce la presencia de insectos que no nos agradan.
Con su pH medio de 3,5 es un mejorador del suelo, es decir, ayuda a bajar el pH del suelo (de media por encima de 7) para llevarlo hacia los valores óptimos entre 5 y 6, de esta forma se facilita la vida de los organismos útiles al suelo.
 
Una vez instaladas las colonias de microorganismos de NAMI, se reproducirán por sí solas y por tanto, a medida que pase el tiempo tendremos que añadir cada vez menos. Evitando el uso de pesticidas y fertilizantes químicos evitaremos matar los microorganismos útiles y por lo tanto, al cabo de unos años el suelo será autosuficiente, sólo tendremos que añadir materia orgánica, mejor aún si es biológica.
 
 
TRANSPLANTE DE PLANTAS : Dado que la fase de trasplante es estresante para las plantas, es muy importante regar bien y en gran cantidad con NAMI diluido con agua, en una proporción de 1 a 10 la primera vez, de esta forma se aumentarán las colonias de microorganismos útiles, ayudándonos a que las raíces asimilen rápidamente.
 
POTENTE REDUCCIÓN DE INSECTOS Y PEQUEÑOS ANIMALES: Los microorganismos útiles de NAMI descomponen más rápido la sustancia orgánica, evitando la llegada de los molestos insectos que se supone deben hacer ese trabajo. Al no encontrar más alimento estos insectos no se quedan ni reproducen.
 
 
NAMI mejora la fertilidad del suelo. Los microorganismos NAMI producen enzimas que son mediadores para la absorción de minerales (NO3, PO4, K+) por las raíces.
Las raíces absorben los nutrientes a través de los pelos radicales pero el espacio entre las partículas del suelo no es accesible para las raíces de las plantas. La mayor parte del agua y los minerales se encuentran en estos microporos y, por lo tanto, una red de hongos (microorganismos) es esencial para llevar sustancias a las raíces.
COME : Vierta NAMI en la regadera y luego agregue agua tibia, déjelo reposar al sol durante al menos 10 minutos (si es más tiempo, mejor, incluso 1 día va bien) y luego riegue las plantas.
 
CUÁNTO : 1 parte de NAMI y 20 partes de agua. Por ejemplo, para un recipiente de 10 litros, sería medio litro de NAMI y luego rellenar con agua tibia hasta completar los 10 litros.
 
CUÁNTAS VECES : Repetir una vez al mes de abril a septiembre, combinándolo con fertilización orgánica dos veces al año para potenciar su efecto.
 
 
CÓMO : Vierta NAMI en la regadera y luego agregue agua tibia, déjelo reposar al sol durante al menos 10 minutos (si es más tiempo, mejor, incluso 1 día va bien) y luego riegue las plantas.
 
CUÁNTO : 1 parte de NAMI y 20 partes de agua. Por ejemplo, para un recipiente de 10 litros, sería medio litro de NAMI y luego rellenar con agua tibia hasta completar los 10 litros.
 
CUÁNTAS VECES : repetir 2 veces al mes de abril a septiembre, combinándolo con un abono orgánico para potenciar su efecto y obtener hortalizas más vigorosas.
 
 
CÓMO : En el caso de pequeños jardines, proceder como lo indicado para terrazas, en el caso de grandes espacios se puede añadir NAMI en el riego por goteo.
 
CUÁNTO : 1 parte de NAMI y 20 partes de agua. Por ejemplo, para un recipiente de 10 litros, sería medio litro de NAMI y luego rellenar con agua tibia hasta completar los 10 litros.
 
CUÁNTAS VECES : repetir una vez al mes de abril a septiembre, combinándolo con un abono orgánico 2 veces al año, para potenciar su efecto.
 
CÉSPED: Para una bomba de presión, mezclar 1 litro de NAMI en su interior con 10 litros de agua y luego pulverizar en el suelo. Es preferible realizar esta operación antes de una tormenta o en las horas más frescas y luego inmediatamente mojar abundantemente el suelo. Repetir 3 veces al año, abonando 2 veces al año con abono orgánico, mejor aún si es biológico. Esta operación se puede evitar si al cortar el césped se deja la hierba en el suelo en vez de recogerla.
 
COMPOSTAJE: Pulverizando NAMI diluido una vez por semana sobre el compost, hará que las reacciones químicas sean mucho más rápidas gracias a las enzimas introducidas, eliminando los malos olores y reduciendo los tiempos de formación del compost en 2/3.
 
 
Este es el verdadero secreto de la buena armonía y el equilibrio. Incluso en áreas pequeñas, como huertas y jardines, es posible crearlo, por ejemplo, dejando áreas sin cultivar a un lado o algunas hierbas silvestres. De esta manera permitimos que la naturaleza cree un ecosistema más equilibrado y, por lo tanto, útil para todos. En agricultura es posible dejar crecer la hierba a lo largo de los bordes de los cultivos cortándola 2-3 veces al año, lo mismo ocurre con el césped debajo de los cultivos, si es que son huertas.
 
 
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